Mucha gente habla de cadenas dinámicas, cómo es su operación y cuáles son los beneficios para el sistema logístico de una empresa. Estas en realidad son de gran ayuda para anticipar los retos del mercado y enfrentar los cambios que se dan en la industria. ¿Pero sabes cómo llegar a tener una operación de este tipo en tu sistema de distribución?
Para lograrlo se necesita un alto nivel de madurez en la gestión de tu cadena de suministro, y para saber si ya estás en el momento indicado para implementar algo así, tienes que cumplir con estas capacidades:
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Excelencia funcional: un desempeño interno estable e iniciativas dirigidas a optimizar los costos de operación aprovechando todos los recursos disponibles; así se logra un mejor funcionamiento en la administración del almacén.
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Cadena integrada: tu gestión ya no se debe enfocar sólo en la optimización de los costos, sino en orientarla al nivel de servicio, logrando una mejor comunicación entre las diferentes áreas que integran el sistema.
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Empresa extendida: esto se trata de lograr gestionar modelos de colaboración que integren a clientes y proveedores, compartiendo información, inversiones, esfuerzos y riesgos. La finalidad es unir las distintas cadenas de suministro involucradas para crear una sola extendida.
Operación dinámica: para lograr esto se necesita un sistema para obtener información oportunida y al momento que te de visibilidad sobre toda tu cadena de suministros, utilizando herramientas digitales (business intelligence) para analizar los datos obtenidos y adelantarse a los movimientos del mercado.
Lograr esto puede resultar en grandes beneficios a nivel cuantitativo y cualitativo en tu sistema de suministros, logrando una ventaja competitiva en la industria, optimizando costos y subiendo tu nivel de ingresos. ¿Necesitas saber más? Pregunta con nuestros expertos, ellos podrán asesorarte.