Los paneles solares son un medio de captación de energía limpia creada a partir de los rayos del sol que se ha popularizado en los últimos años, y esto obedece tanto a razones ecológicos, como económicas, ya que pueden reducir en una gran medida el gasto generado por el uso de combustibles tradicionales como el gas o la electricidad. Existen de dos tipos:
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Colector solar: estos son los que producen agua caliente a través de la energía solar térmica, a temperaturas que pueden oscilar entre los 40° y 50° C.
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Panel fotovoltaico: estos son los que producen electricidad a partir de la energía fotovoltaica emitida por los rayos del sol.
Estos dispositivos resultan muy baratos a mediano plazo, además de tener una duración de alrededor de 30 o 40 años, dependiendo del uso y cuidado que les brindes. ¿Por qué deberías instalarlos en tu casa o lugar de trabajo? Aquí te presentamos algunas de sus ventajas.
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Reducción directa de alrededor del 70% del costo asociado a otro tipo de fuentes de energía, tanto eléctricos como gas o leña.
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Al no producir gases derivados de su utilización, no contribuye al efecto invernadero ni afecta al cambio climático.
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En los últimos años, el costo de instalación y mantenimiento se han visto reducidos de forma considerable, a diferencia de otras fuentes de energía que van elevando sus costos con el tiempo a causa de la escasez o los impuestos.
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Son más seguras y requieren menos cuidado en su manejo que el gas o las instalaciones eléctricas, el número de accidentes causados por este tipo de dispositivos es muy bajo en comparación.
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Puede elevar el valor patrimonial de los inmuebles que cuentan con este tipo de instalación.
Estas son algunas de las razones por las que optar por este tipo de fuentes de energía podría resultar en algo benéfico para tu almacén, oficina o casa. Si necesitas saber costos y consejos para elegir los que más te convienen, no dudes en preguntarlo a través de nuestras redes sociales.